La actividad orientadora se realiza, ante todo, en vinculación estrecha e indisociable con la práctica docente: en el cumplimiento de la función tutorial. La tutoría constituye un elemento inherente a la actividad docente dentro de un concepto integral de la educación. |
Es preciso potenciar la figura y las funciones del tutor/a en todas las etapas y modalidades de la enseñanza. Se deberían desarrollar programas de orientación y formación de los profesores tutores, así como instrumentos didácticos que les resulten de utilidad en su acción tutorial. Los programas de formación inicial y de perfeccionamiento del profesorado deberían incluir contenidos que preparen y cualifiquen a los profesores para el desempeño de la función tutorial.
En el nivel de secundaria, pasan a prevalecer los aspectos de orientación relativos a la elección entre distintas vías y opciones educativas, así como el afianzamiento de técnicas eficaces de estudio. La orientación profesional presupone información profesional, pero no consiste sólo en ella. Además, ha de tomar en cuenta las aptitudes, inclinaciones e intereses personales de cada individuo. (Libro Blanco, 1989). |